El cuento de la criada se publicó en 1985 y catapultó a su autora a la fama mundial, aunque en España estaba descatalogada y se ha vuelto a editar en el año 2017 (Salamandra) a raíz del éxito de la serie de telévisión en la que se basa.
Es una novela distópica (una sociedad ficticia, que ha surgido a raíz de un desastre y en la que hay una situación perjudicial, consecuencia de tendencias sociales actuales.
La narradora es la protagonista, Defreds que vive en un mundo extraño en el que las mujeres están separadas por categorías, obligadas a vivir y vestir según la función que se les ha asignado. Ella es una criada y por tanto tiene que vestir de rojo y su única misión es procrear, tener hijos para una familia de clase superior que no puede tenerlos. Pero comienza a vivir una serie de acontecimientos que modifican su rutina y empieza a abrir los ojos a las personas que le rodean cada día.
La narradora habla con elegancia y sencillez. Como las mujeres están completamente anuladas, sin posibilidad de decidir, el tono de la narradora es frío, carente de emoción, pero es una voz creíble, sensible, frágil, que consigue que nos identifiquemos con ella.
Esta novela es un alegato contra la misoginia, la violencia institucional y el fundamentalismo religioso. A pesar de provocar inquietud e incomodidad en todo momento, es una novela necesaria porque hace reflexionar. No solo en los peligros de nuestra sociedad sino en cómo se vive en otras partes del mundo (varios acontecimientos reales han inspirado a la autora) en nuestros privilegios.
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